

La conmovió pensar que este chico con un trabajo que la mayoría consideraría no importante, lo había hecho importante creando recuerdos preciosos para todos sus clientes.
Un mes después el gerente de la tienda la llamó y le contó que un día vio una larga fila frente a una de las cajas y rápidamente dispuso que se abrieran más cajas pero los clientes no querían cambiarse, querían seguir en esa fila porque querían recibir el pensamiento del día que les daba Johnny. Una cliente incluso dijo que ahora procuraba ir más seguido por los pensamientos que le daba Johnny.
Meses más tarde volvió a llamar el gerente par
a decirle que Johnny había transformado su tienda. Ahora si en el departamento floral se rompía el tallo de una flor la convertían en corsage para dárselo a alguna señora mayor o una niña. Todos se están divirtiendo creando recuerdos. Sus clientes hablaban sobre ellos, regresaban y traían a sus amigos. Un maravilloso espíritu de servicio se había contagiado en toda la tienda… y todo por que Johnny decidió hacer la diferencia.
La idea de Johnny no era tan innovadora como amorosa. Surgió de su corazón… era real. Eso fue lo que conmovió a sus clientes y compañeros y todos aquellos que han leído esta historia. El mejor servicio viene del corazón.

No hay comentarios:
Publicar un comentario